La verdad es que no existen sistemas operativos perfectos, y aunque algunos usuarios prefieren utilizar Linux, Windows o Mac, eso no es garantía de que los datos no se puedan perder. El decir que un sistema operativo es mejor que otro es algo subjetivo, porque cada usuario tiene necesidades distintas.
Independientemente del sistema operativo que se utilice, los dispositivos de almacenamiento tienen una forma de funcionar que no cambia con el software. Es decir que un disco duro funcionará de la misma forma con un usuario que utilice Windows o Mac, por lo que el problema con la diferencia no se encuentran el software, sino en el hardware.
Este tipo de circunstancias aunque se pueden prevenir no se pueden evitar del todo por lo que siempre recomendable hacer copias de seguridad de los archivos más importantes y asegurarse de evitar situaciones como por ejemplo cortar el suministro de energía eléctrica abruptamente o someter a los discos duros a maltrato físico ya que éstos son muy sensibles a los movimientos bruscos que pueden dañar los componentes mecánicos internos que se encargan de almacenar la información en las pistas y sectores.
